jueves, 2 de julio de 2015

El teatro en Educación Infantil

Este trabajo es un resumen del texto: 
El teatro en Educación Infantil
Sofía Domínguez Martínez


2. La importancia del teatro en educación infantil:

El teatro ayuda a los niño/as en la mejora del lenguaje, de la compresión y especialmente de la expresión. Amplían su vocabulario; mejora la pronunciación, entonación y vocalización; permite conocer su voz aguda, grave, fuerte y débil. Impulsa a los niño/as más tímidos a ir perdiendo poco a poco ese miedo a relacionarse con  los demás o a hablar en público y a aceptarse a sí mismo, por lo tanto se está propiciando a una buena socialización, autoestima y autonomía personal. Y no solo eso sino que también enfatiza la cooperación y el trabajo en equipo y les hace sentir que forman parte de un grupo de iguales.

La dramatización influye positivamente en la expresión corporal y gestual; en la comprensión de su cuerpo (de cada una de sus partes: los brazos, las piernas, la cabeza, sus ojos).

Potencia el desarrollo psicomotor y el movimiento espacial, es decir, la lateralidad y el desenvolvimiento con confianza y seguridad en el medio.
Toda representación teatral da lugar a que los niño/as sean críticos consigo mismos y los demás, a que se sientan libres, a conocer el mundo que les rodea (con cada valor o tema que se trata en la representación); y por tanto a conocer las manifestaciones y los valores de la cultura de su sociedad e interiorizarlos poco a poco configurando, de esta manera, su moral y personalidad.

3. Historia del teatro infantil:

Platón, pensaba que los infantes desde los tres años hasta llegar a la adolescencia debían unirse a cánticos públicos, acompañados de bailes. Esquilo también defendió el valor de la expresión infantil. Y es que lo que se pretendía en épocas pasadas era que niño/as y jóvenes se hicieran participes de las manifestaciones de su cultura, es decir, del folclore.

En la edad media y en el Renacimiento destacó sobre todo el teatro de niño/as con títeres.

En el siglo XIX y principios del XX, aparecieron los hermanos Grim, Charles L. Dogson, Charles Dickens, entre otros. Pero fueron Jacinto Benavente y Eduardo Marquina quienes introdujeron un verdadero teatro para niños en España del 20 de diciembre de 1909.

4. Creación de una representación teatral:
La primera misión del profesor-animador es la de crear un ambiente adecuado para trabajar con los chicos/as.
Deberá motivar a los niños y niñas a trabajar en equipo y transmitirle su gusto por el teatro y la representación. También abrir la barrera existente en la relación-alumno/a para que se pueda compartir opiniones e ideas.

El papel del profesor-animador, deberá enseñar a actuar, a cooperar entre ellos; a desarrollar su libertad de expresión y su creatividad y originalidad.  Además debe saber detectar cualquier problema o fallo que pueden surgir día a día y sobre todo los referentes a la interacción entre los chicos/as: marginación, intimidación, timidez, frustración, aburrimiento… procurará conseguir que los niños/as salgan de la rutina y sepan disfrutar del teatro tanto de espectador como de actor. Una función muy importante también del docente es la de compartir información, opiniones, ideas, críticas con el resto de profesionales del centro, para que florezcan la innovación; la creatividad, entre otros.

4.2 Reparto de papeles:
Diferentes criterios de selección: partiendo del aspecto físico del niño/a en relación con el personaje, decir que debe tener en cuenta también la semejanza de personalidad.

El docente siempre le dará mucha importancia a todos y cada uno de los personajes para que los críos no consideren que su papel sea peor que otros.

4.3 Los ensayos:
Los ensayos permite que poco a poco los niños/as aprendan su papel o personaje y conozca el de los demás, así como saber cuándo y cómo debe actuar. Hay que darles la facilidad de decir ciertas cosas con sus palabras, para que posibilite la memorización y expresión y además si lo aprende comprendiéndolo ayudará a que en un momento de nervios puedan improvisar o recordar el guión más fácilmente.

Hay dos tipos de ensayos:

·         Aquellos donde el “director” es poco permisista y quiere que los actores conozcan al pie de la letra el guion.

·         Y aquellos en el que el “director” da libertad a los actores a crear su propia interpretación. Este tipo de ensayo permite que los pequeños/as cultiven su creatividad y motivación.

Es bastante relevante si tratamos los ensayos como algo lúdico, divertido, entretenido para evitar que los niños lo consideren como algo aburrido provocando de esta manera que rechacen el teatro y tenga una visión frustrante de algo tan positivo como es la dramatización.

4.4 Lugar donde se realizan los ensayos:

Este debe ser un espacio, como pocos elementos de distracción, debe estar alejado de ruidos y peligros. La iluminación debe ser neutra.

El lugar tiene que ser confortable para que los niños se sientan seguros, tranquilos sin interrupciones ni otros compañeros que lo observen y puedan hacerles sentirse inseguros, avergonzados o les incomode ya que a estas edades las miradas y posibles burlas de otro compañero/a mayor puede dar a lugar a que los niños afloren el miedo a la actuación en público.

El tiempo de los ensayos no debe ser excesivo ya que puede llegar a aburrir y cansar a los alumnos/as. Se aconseja que no sea más de una hora y media o dos diarias. Es importante que se dé tiempo a la relajación y para recoger y ordenar el lugar donde se ha trabajado.

Los materiales dependerán del papel de cada actor, si es posible, creados por ellos mismos y motivadores.

5. Técnicas y juegos que favorecen la representación teatral.

Deben cumplir unas peculiaridades en función a la edad que va dirigida; estas son: Mantener unas normas adecuadas; que no sean actividades variadas sino concentradas en un mismo tema; evitar el cansancio físico y promover una verdadera eclosión del movimiento.

Los materiales usados en las sesiones deben ser adecuados para que los pequeños puedan manipularlos con libertad, que se adapte a sus necesidades e intereses. Hacer unas adaptaciones a cada ejercicio según a la edad concreta a la que se dirija y las características de los niños/as.

Pretende desarrollar la psicomotricidad de los pequeños y las posibles formas de expresar y comunicar a los demás con cada una de las partes de su cuerpo. Y de esta manera favorece a la expresión de los sentimientos.

5.2 Mímica:
También llamada expresión gestual. Es aquella que posibilita reproducir una situación con gestos faciales y corporales dando vida al personaje y a lo que se desea transmitir.

5.3 Expresión Oral.
Tiene el objetivo de que el actor y actriz sepa comunicar algo mediante la palabra y otros aspectos lingüísticos como la entonación, pronunciación y vocalización y su intención o intenciones; por lo que hay que comprender el contexto globalmente.

6.1 El escenario:
El escenario incluye tanto la iluminación, como el decorado y la música que pueden ser elegidas por el docente, por los niños/as o por ambos.

La iluminación es algo que da vida a la obra ya que en función del tipo de luz hace que la escena sea mucho más real.

Para evitar cualquier imprevisto es fundamental que se hagan pruebas antes de la actuación. La mayoría de los materiales decorativos del escenario sean fáciles de hacer, con materiales manejables para los pequeños.

La melodía que se ponga da ideas al público de lo que está pasando a lo que va a pasar en una escena.

La música por tanto se pone por dos motivos:
·         De fondo dando belleza al teatro y a as escenas.
·         Las que son esenciales para marcar ciertas acciones para provocar en el publico algún sentimiento.

Es sustancial que todos los críos tengan un disfraz más o menos elaborado.  Lo más importante de la actuación a estas edades es que se lo pasen bien, disfruten, se sientan cómodos; satisfechos de lo que han hecho y que le guste el teatro como experiencia.

Al terminar la actuación todos estarán muy contentos pero también cansados con lo cual es el instante para recoger todo el material y relajarse. Después de la relajación, hablarán de cómo han visto la representación, si lo han pasado bien, que es lo que más ha gustado, dar opinión sobre el resultado final de tanto esfuerzo, alabar el trabajo que han hecho…

Lo importante es que ellos/as aprendan a aceptar y elaborar ellos mismos sus propias criticas.

7.- Otros recursos teatrales.

El títere puede tener tres funciones:
·         Como elemento-puente entre el docente y los alumnos.
·         Como ejercicio de expresión.
·         Y como espectáculo.

La marioneta facilita la expresión del niño/a y sobre todo de aquello que son más tímidos. Expresa sus sentimientos, sus ideas, su forma de ver el mundo y la realidad. Al títere como espectáculo, es una forma muy entretenida de hacerlo de cara al público tanto en un centro escolar como no.

La mascara es un fabuloso material motivador, que provoca la realización de acciones en los niños/as insospechables, ya que para ellos/ellas es como se cambiaran de persona o fueran alguien nuevo.


Las sobras corporales:

Esta forma de representación teatral llama mucha la atención de los niños y les encanta hacerlo y verse a ellos/as mismos/as. Es semejante a las sombras chinescas.

Individualmente los niños/as también podrán hacer parodias de varias acciones: clavar un clavo, partir madera…

7. Conclusión:


El teatro debería considerarse una materia más a tratar en la escuela infantil y en todos los ciclos de la enseñanza ya que los fines educativos que tienen, evidentemente, son muchísimos y es por ese mismo motivos, que los docentes debemos hacer teatro con nuestros niños/as procurando de esta manera la evolución de todas sus habilidades y puntos fuertes. 

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